Elementales de Aire

 

Flagae

Algunos magos no distinguen al flagae de los simples duendes e incluso los confunden con los ángeles de la guarda, pero Huesis considera que se trata de una especie diferente. Corresponden al elemento aire. Comenta que a veces se les llama “espíritus familiares”, ya que algunos de ellos asumen el oficio de protector y habitan rincones o esquinas, trabajo más propio de un lar. Suelen ser amarillentos, pero el sol los “broncea” otorgándoles un color marrón. El rostro, de rasgos humanos, es alargado, la nariz grande y el mentón puntiagudo. Algunos tienen antenas. Los ojos son diminutos y de un color negro profundo. En general, tienen un temperamento melancólico, pero los hay más vivaces y alegres. Son sociables, muy trabajadores y no temen realizar grandes sacrificios para conseguir lo que se proponen. Existen machos y hembras. Aun perteneciendo al elemento aire, poseen un organismo sólido.

Lar

Juan Huesis llama “lares” a ciertos duendes emparentados con los silfos y los flagaes, cuya función más importante es la de “custodiar” un objeto o lugar particular. Suelen tener los oficios de guardián, patrón o protector y es habitual encontrarlos en esquinas, almacenes, rincones o junto a monumentos históricos. El autor no describe el aspecto de estos seres, ni su personalidad, sin embargo, afirma que tienen costumbres gregarias y hay tanto machos como hembras. Existe una sub-especie de carácter sagrado conocida como “odoacros”, dedicada a la tutela de tesoros, y otra que protege los almacenes y despensas, conocida como “penates”.

Silfo o Sílfide

Es la especie más representativa del elemento aire. Según Huesis adoptan muchas formas diversas, aunque predomina cierto aspecto que mezcla rasgos humanos y de ave. Generalmente tienen la piel de color cetrino. Suelen tener consistencia sólida, pero esta densidad es variable. En ocasiones son portadores de cierta “corporeidad” gaseosa. Pueden volar, flotar en el aire y también caminar por tierra. Algunos tienen alas, otros “aletas como los peces” y la mayoría brazos y piernas, pero en todos los casos, presentan un gran dominio sobre el aire y los vientos. Tiene costumbres muy complejas, con una inmensa variedad de caracteres y temperamentos. Huesis no describe ninguno en particular. Los hay machos y hembras, pero parece que pueden aparearse también con otras especies elementales.

Ornitorrago

Huesis clasifica el ornitorrago entre los monstruos. Considera que son una cruza entre silfos y ogros, pero conjetura que también podría tratarse de una especie antecesora de ambos. Suelen tener un rostro muy similar al de los escuerzos, con una gran mandíbula dotada de pequeños dientes afilados. Poseen un cuello retráctil, como el de las tortugas y un cuerpo de pájaro, parecido al de los patos. La piel puede ser de color amarillento, pero algunos son de color cetrino. Sus costumbres son similares a la de los silfos comunes, con preferencia por los oficios relacionados con las ciencias y las letras. El autor no explica cómo se reproducen y si existen diferencias de género en la especie.

 Silfogario

Parecen ser una sub-especie de los silfos, pero Huesis, tal como ha explicado respecto a los terragarios y flamagarios, teoriza que podría tratarse de una cruza entre silfos y terragarios, o bien, entre silfos y flamagarios, ya que muchos de ellos presentan un carácter bastante fogoso. Presentan un organismo provisto de “carne y sangre”, pero el elemento más importante en su constitución es, como se deduce del nombre, el aire. Poseen la piel con tonalidades cobrizas, con predominio del cetrino. El aspecto, en general, es semejante al de los silfos, pero tienen un cuerpo fuerte y musculoso, de gran tamaño. Aun así, pueden volar, flotar y desplazarse ágilmente por tierra. Parece que solo existen machos en esta especie, lo que convierte en un misterio su modo de reproducción. Huesis conjetura que se duplican por “brotación”. Sin embargo, está demostrado que pueden aparearse con miembros de otras especies. Tal como los terragarios y flamagarios, son poco inteligentes y suelen desempeñar oficios relacionados con la seguridad y el uso de la fuerza.