La Cábala: codificación y lenguaje en El Descifrante

hebreo

La Cábala (también conocida como Kabbalah o Qabbalah) es una Disciplina espiritual  considerada como una corriente mística dentro del judaísmo.  En hebreo, Cábala significa “Recepción” e implica que forma parte de una Tradición de siglos, que se enfoca principalmente en la unión con la Deidad. A ese estado, se llega mediante diferentes vías de acceso, que consisten en un trabajo equilibrado de elevación de la Consciencia a través de diferentes niveles, hasta re-integrarse en el Origen o la Fuente de todo. La búsqueda de esta profunda comprensión y transformación del ser, se basa en el uso de diferentes sistemas y métodos. Uno de los más importantes es el estudio y exégesis de la Torah y los textos sagrados judíos. Sin embargo, existen diferentes líneas, como la Cábala Cristiana, por ejemplo, que amplía el estudio a los libros del Nuevo Testamento.

El Rosacrucismo, la Alquimia y la Masonería, transmiten gran parte de su enseñanza con símbolos y expresiones vinculadas a la Cábala.

Para la interpretación de la enseñanza cabalística

Una de las nociones fundamentales de la Cábala es que los textos sagrados contienen enseñanzas ocultas que son posibles de ser desveladas apelando a ciertas técnicas y métodos. Uno de los métodos de exégesis más utilizados es la guematría, la cual supone que una palabra hebrea puede transformarse en número y viceversa. Esto es debido a que las letras hebreas tienen valor numérico.

Una forma habitual de guematría es, por ejemplo, sumar el valor numérico de cada letra y si el resultado es una cifra formada por más de un número, se suman los dígitos hasta reducir la cifra a un solo número. En general, las palabras que tienen el mismo valor numérico están relacionadas, o bien son equivalentes y pueden sustituirse unas a otras. Este método, permite descifrar muchos textos.

En El Descifrante, se ha utilizado la Cábala para ampliar el sentido simbólico de muchas escenas, por lo cual, es importante que el lector, si quiere profundizar, preste atención a las palabras que puedan resultar extrañas o  los números que suelen aparecer en el relato. No están puestos porque si. Aunque el número de una casa exista en la realidad, si fue elegido como parte de alguna escena en particular, es porque señala cierta cuestión a tener en cuenta.

Otro instrumento para ampliar el sentido de un texto mediante simbología, es el uso del diagrama conocido como Árbol de la Vida, formado por diez esferas (llamadas Sefirots) que describen las leyes del Cosmos y el  propio ser humano.

La Ciudad de Buenos Aires que aparece en El Descifrante, por ejemplo, y el recorrido que realiza el protagonista a través de los diferentes barrios, se basa en una analogía entre los rasgos originales de la Ciudad y la esfera de Malkhut, que en Cábala es la esfera más material, la del plano físico.

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